Bebés

De 0 a 8 meses

Actividad acuática pensada para bebés de 0 a 8 meses en que sus primeros baños sean una experiencia absolutamente placentera acompañados de sus mamás y sus papás. El objetivo de estas sesiones es la adaptación al medio acuático y el planteamiento es que éste sea lo más relajado y natural posible.

  • Sesiones de 45 minutos

  • Grupos reducidos (máx. 6 bebés)

  • Papás y mamás bienvenidos

Actividades acuáticas para bebés 0-8 meses

Durante los primeros seis meses de su vida, el bebé irá controlando los músculos de los ojos, la cabeza, los hombros, los brazos, las manos y por último de las piernas, los dedos y los pies. Irá perfeccionando los reflejos que al nacer le servían para adaptarse al medio. Sus necesidades, en esta etapa, son básicas… en resumen, necesitan estar cerca de su mamá.

Esta actividad acuática está pensada para los bebés de 0 a 8 meses en que sus primeros baños sean una experiencia absolutamente placentera acompañados de sus mamás y sus papás. El objetivo de estas sesiones es la adaptación al medio acuático, y el planteamiento es que éste sea lo más relajado y natural posible. La premisa es que si los adultos disfrutamos de nuestro cuerpo en el agua, los bebés que están con nosotros lo harán también. Tendremos en cuenta sus neuronas espejo, que tienen como funciones principales el aprendizaje y la empatía.

Durante la sesión para bebés de 0 a 8 meses se irán ofreciendo posibles experiencias para los bebés, guiadas por sus padres y de vez en cuando, si es oportuno, también por la monitora. El nivel al que llegue cada bebé dependerá de lo que los padres consideren confortable, y sobretodo de lo que el propio bebé vaya demandando en función de su desarrollo y su propio interés. En ningún caso se fuerza al niño a hacer nada que no quiera hacer. Lo más importante es que el bebé sea feliz en el agua.

La libertad y la integridad de cada ser humano se hacen en el vientre y en el regazo materno

– Casilda Rodrigáñez –

Preguntas habituales

Los bebés están diseñados para poder ir al agua en cuanto nacen. ¡De hecho, es para ellos más natural el medio acuático, después de 9 meses de vida en el líquido amniótico! Lo que debemos tener muy en cuenta es a qué piscina vamos a llevar al bebé, y más en concreto, las condiciones higiénico sanitarias y las temperaturas, tanto del agua como del ambiente y de los vestuarios.

Si las condiciones son idóneas, en esta escuela puedes empezar desde el segundo mes de vida del bebé: la adaptación al medio acuático no se verá interrumpida por esos meses de vida "en seco2, en los que el bebé comienza a moverse y a usar su peso "con gravedad".

Le darás también la oportunidad de moverse en el agua, utilizando su cuerpo de una manera diferente e incorporando todas esas sensaciones motoras a su registro desde el comienzo. Su estructura cerebral se desarrollará entonces de otra manera. Es como cuando un bebé crece desde el comienzo con dos idiomas "maternos" y se hace bilingüe.